El uso es contagioso
Haz memoria. ¿Recuerdas cuando empezaste a usar la tecnología blockchain?
Digamos que hace relativamente poco tiempo que entraste en el mundo cripto. Digamos también que te descargaste la aplicación Maiar, que compraste algunos tokens EGLD, te abriste una wallet en la web de Elrond y has llegado a participar de Maiar DEX en sus pools de liquidez y farms.
Además de todo eso, hace tiempo que pusiste algunos EGLD en staking y que cada cierto tiempo reinviertes las recompensas a través de Maiar o de la wallet web. Y además te compraste tu primer NFT y te has sumado a algún proyecto interesante dentro del ecosistema de Elrond.
Si éste fuera el caso, ya habrás tenido tiempo de plantearte: «¿Y si me pasa algo a mí, todos esos fondos qué pasará con ellos?»
Explicando la tecnología
La mayoría de miembros de la comunidad de Elrond ya se ha visto en la situación de explicarle a algún amigo toda esta tecnología y sus beneficios. Y a la mujer, marido, hijos o padres también se lo habrás explicado, en mayor o menor medida.
Piénsalo un momento, en estos últimos meses, ¿a cuántas personas introdujiste en este universo? Y hazte esta pregunta también, ¿esas personas se lo explicaron a alguien más? Seguramente la respuesta sea afirmativa.
El efecto replicador es una cuestión matemática lógica. Si hiciéramos una transposición de los casos de adopción en una línea de tiempo, añadiendo la variable de la segunda, tercera y cuarta ola de adopción causada por nuestra acción inicial, veríamos que la curva de adopción se vuelve exponencial.
Pero hagamos el ejercicio mental un poco más interesante y realista.
Imagina que hayas compartido en alguna de tus redes sociales el hashtag de $EGLD o #Mission10 y que en algún momento alguien reaccionara a tu publicación y comenzara a investigar por su cuenta.
¿Quizás también le comentaste a alguien en el trabajo? ¿Llegaste a hablar con alguien de tu banco acerca de ello y se mostró sorprendido e interesado? Posiblemente sí.
Digamos que en total hablaste del tema con 10 personas directamente y que a dos personas les llamara la atención en las redes sociales. Tenemos una escala de crecimiento bastante interesante ahí.
Asegurando la transmisión
Llegado este punto, tras haber estado unos meses gestionando tus cuentas y activos, comienzas a darle verdadero valor a aquello que estás custodiando tú. Porque sí, en Elrond tus llaves son tu banco.
Todos los usuarios de blockchain tenemos inquietudes similares en este sentido.
Ahora es el momento de plantearse a quién le vamos a explicar cómo debe hacer para recuperar el acceso a esos fondos. Y lo que es más importante quizás, qué debe o puede hacer con ellos.
De pronto el escenario es que habrá más personas introducidas en conocimientos más profundos sobre cómo funciona el stake, cómo operar en DeFi, qué hacer con las claves o cómo recuperar una cuenta de Maiar porque perdimos el teléfono.
La necesidad obliga
La realidad puede ser que nuestro propio uso de la blockchain y los tokens en Elrond, haga de la adopción algo INEVITABLE verdaderamente.
La psique humana tiende hacia los mecanismos de conservación y reproducción. Tenemos impulsos e instintos que hacen que queramos transmitir nuestro legado para que otros puedan aprovecharlo.
Te propongo finalizar el ejercicio mental con esta reflexión: asumiendo el escenario planteado como realista (tendiendo a conservador, para ser honestos), ¿qué crees que pasará cuando todas esas personas a las que ya iniciaste en este mundo, sientan el mismo impulso transmisor que tú?
La gran adopción es inevitable. Y eso es en lo que está trabajando el equipo y la comunidad de Elrond.